México gentrificado

Por Olivo García, Iván Tarin

La Marx México


El tema de la gentrificación en México no resulta novedoso, tampoco la palabra, mucho menos como actividad social recurrente y, aunque se puedan presentar algunas peculiaridades, nada nuevo bajo el sol.

La administración morenista de Clara Brugada, en la capital del país, y Claudia Sheinbaum, a escala nacional, lo mismo que los gobiernos de la oposición intensifican y permiten los medíos para que el despojo y los desalojos se lleven a cabo, en este caso, en colonias del centro histórico de la Ciudad de México.

Solo en el último mes, en 3 hechos distintos, alrededor de 56 familias de la ciudad de México, han sido desalojadas de sus casas y/o departamentos en distintas zonas del centro histórico.

Sin notificación previa, familias de las colonias Roma, Narvarte y Centro Histórico fueron despojadas de sus inmuebles. Los hechos estuvieron plagados de denuncias por abusos de autoridad, robos, así como negligencias de parte de los actuarios y la fuerza pública.

Aunque el fenómeno ha puesto el foco principalmente en la ciudad de México, los denominados “Pueblos Mágicos” como San Miguel de Allende en el estado de Guanajuato, otros como Oaxaca, Querétaro, San Luis Potosí, Mérida, Monterrey comparten la huella de la gentrificación que se ha extendido en la república mexicana.

Poco a importado si los gobiernos locales son del PRI, PAN, Morena y/o cualquiera de los partidos satélites, la gentrificación de la mano del “Cártel Inmobiliario” se presenta sin importar los colores partidarios.

Cártel Inmobiliario

La gentrificación resulta de la acción de los agentes capitalistas conocidos bancos, aseguradoras y agencias inmobiliarias, especialmente, quienes en contubernio con los gobiernos locales (democracias burguesas), rompen el tejido social de los barrios populares e históricos de las grandes ciudades, gentrificando importantes áreas céntricas así como colonias completas, aunque ellos, el cártel inmobiliario, prefieran llamar revitalización, rescate y/o regeneración del espacio urbano, todo ello, para ocultar sus estrategias de especulación y restructuración capitalista-territorial.

Es la socióloga germano-británica Ruth Glass, quien acuñó el término en 1964, mismo que se utilizó para describir a personas de la clase media y alta, cuando se mudaban a los barrios de clase obrera en Londres, desplazando a la población original y modificando el espacio urbano.

Lo que la investigadora descubrió es que se estaba dando una afluencia de personas con mayor poder adquisitivo a barrios obreros, generando un desplazamiento de las clases trabajadoras y sus familias.

El encarecimiento por uso de suelo ocurre cuando, el valor de un terreno aumenta, debido a cambios en la demanda de su uso, sea para las actividades urbanas, comerciales e industriales, como sucede al expandirse las grandes ciudades, del mismo modo, que al cambio y construcción de infraestructuras urbanas. Modificándose entornos y paisajes, así como desplazando a las y los residentes de bajos ingresos, debido al incremento en los costos de las viviendas, pero a su vez, modificando e impactando en la dinámica social y económica de las zonas en cuestión.

En los recientes casos de la ciudad de México, residentes desplazados y organizaciones políticas solidarias sostuvieron que se trató de un desalojo ilegal, con un origen cargado de corrupción de parte de las autoridades, (Morenistas y no), que incluso se reveló un “modus operandi” entre empresarios coludidos y autoridades implicadas que, en común, tejen una estructura que reviste de legalidad un despojo, en donde se está acaparando el suelo y dejando en la calle a trabajadores y familias, ahora adultos mayores en situación de calle.

La parte novedosa en esta nueva oleada gentrificadora, la otorga el outsourcing como rasgo neoliberal.

La izquierda reformista del Morena está aplicando en conveniencia con empresas inmobiliarias, grandes corporativos y multinacionales, presentando un nuevo elemento, recordemos que desde la administración anterior de López Obrador, el outsourcing/subcontratación fue legalizado en todas sus formas, abriendo la puerta a contratos con empresas de Online como el AIRNBN[1], que a través de la Internet llegan a miles de turistas nacionales y/o extranjeros promoviendo y alquilando sus servicios de vivienda, así como la compra de alojamiento temporal.

La presidenta Claudia Sheinbaum señaló que las protestas contra la gentrificación son “discriminatorias, xenofóbicas y violentas”, acompañados de un sinfín de descalificaciones, condenando las movilizaciones y críticas públicas, sabemos de la composición heterogénea y espontánea del movimiento contra la gentrificación, sin embargo, apostamos a que en su desarrollo ira adaptando y diseñando su programa, así como consignas, claro, en caso de querer crecer, inevitable para enfrentar a la política del oficialismo mexicano entregada al gran capital nacional y trasnacional, pero principalmente al vecino del norte.

La vivienda como mercancía

Desde 1872, Engels, en su “Contribución al problema de la vivienda” sostuvo que el capitalismo jamás podrá resolver el problema de la vivienda, a lo más que puede llegar es a “desplazarla”, de ahí que su respuesta sea gentrificar. Para Engels, “la misma necesidad económica que los generó en un primer momento, los produce también en el siguiente”.

Como vimos, la gentrificación resulta de la componenda entre el cartel inmobiliario y los gobiernos de las burguesías locales, aunque ellos, prefieren hablar de “recreación urbana” y, con ello, pretender ocultar la especulación capitalista.

Es un proceso de modificación urbana en donde las personas con mayor poder adquisitivo se mudan a barrios de bajos ingresos, generando un desplazamiento de los residentes originales debido al aumento de precios de la vivienda y cambios en el comercio. Si bien, este proceso puede mejorar la infraestructura y generar nuevos servicios/empleos, dicen sus promotores capitalistas, cabe mencionar, que a menudo son de un impacto negativo, tanto en la población desplazada que pierde su lugar de origen y acceso a la vivienda, como en los nuevos inquilinos, trabajadores y espacios precarizados generados.

“Los edificios ya construidos sobre estos terrenos, lejos de aumentar su valor, por el contrario, lo disminuyen, porque ya no corresponden a las nuevas condiciones, y son derribados para reemplazarlos por nuevos edificios. Y esto ocurre, en primer término, con las viviendas obreras situadas en el centro de la ciudad, cuyos alquileres, incluso en las casas más superpobladas, nunca pueden pasar de cierto máximo, o en todo caso sólo de una manera en extremo lenta. Por eso son derribadas, para construir en su lugar tiendas, almacenes o edificios públicos”. F. Engels “Contribución al problema de la vivienda”[2].

Por ello, Friedrich Engels afirmó que el capitalismo jamás podrá resolver el problema de la vivienda, ya que este sistema está centrado en la ganancia, transformando incluso la vivienda en una mercancía y un derecho para las y los trabajadores como sus familias. Engels expuso esta idea en su obra de 1872.

En nuestros días, destacamos la movilización política y callejera como la vía de respuesta, al descontento que viene creciendo en todo el país, si bien a diferente ritmo, multiplicándose y sumándose los conflictos que incomodan a los gobiernos sean morenistas o no.

No podemos negar que la gentrificación trae más pobreza al permitir que empresarios capitalistas extranjeros y nacionales (cartel inmobiliario) se adueñen de los centros neurálgicos del comercio de las ciudades. Como dijimos el fenómeno está desplazando sectores de población hacia otros lugares de la ciudad, en donde el comercio tiene pocas posibilidades de progreso.

Por más que se niegue en las “Mañaneras” las acciones del partido en poder actual (Morena), siguen siendo de un gobierno al servicio del imperialismo norteamericano.

Notas

[1] Airbnb, es el nombre de una empresa/plataforma digital (App) dedicada a la oferta de alojamientos del tipo de alquiler vacacional, mediante la cual los anfitriones pueden publicitar y contratar el arriendo de sus propiedades con sus huéspedes.

[2] F. Engels. Contribución al problema de la vivienda.

https://www.marxists.org/espanol/m-e/1870s/vivienda/index.htm

SOURCE:

Loading

Related posts