Por La Marx México
El 2 de Junio del 2024 están convocadas las elecciones presidenciales en nuestro país. Desde La Marx México convocamos a la abstención y el voto nulo, no debemos dar apoyo a ninguna de las dos coaliciones capitalistas que compiten en las próximas elecciones. Ni la candidatura de Claudia Sheinbaum de la Coalición Morena, ni la candidatura de Xochitl Galvez de la Coalición Frente Amplio por México (PAN- PRI PRD) representan los intereses de los trabajadores y el pueblo de nuestro país.
Ambas candidatas buscan defender los intereses del 1% de los dueños de México quienes poseen toda la riqueza y los bienes del país como lo son el Grupo México, el Grupo Salinas, el Grupo BAL, el Grupo Modelo,el Grupo Jose Cuervo, el Grupo Carso, el Grupo Simec, el Grupo Orbia, el Grupo Banorte, entre otros. Mientras éstos grupos económicos acumulan millones de dólares de ganancias, y son cada día más ricos el 99% nos hundimos en la pobreza y miseria con un 40% de la población en México que ya no le alcanza ni para la canasta básica, mientras que quienes ya no llegan a la canasta en zonas rurales son más del 53%.
Éstas elecciones deben ser un demostración amplia y popular de rechazo a las coaliciones que defienden el México capitalista al servicio de los intereses de los Mota Velasco, los Ricardo Salinas, los Bailleres Guel, los Carlos Slim, los Beckmann Legorreta, los Vigil Gonzalez, los Hank Rohn los ricos que son los dueños de nuestro país. Votar a cualquiera de éstas candidaturas significa darle un aval a quienes van a defender los intereses de las clases dominantes y el imperialismo.
Morena: Seis años de pobreza e injusticia para el pueblo
El gobierno presidencial de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se inició en diciembre del 2018 con gran expectativa popular por tratarse de ser el primera vez en la historia que asumía un gobierno que no es del PRI, o el PAN. Sin embargo las ilusiones y expectativas se fueron derrumbando en la medida en que el gobierno de Morena se desarrolló. Primero porque más allá de algún cambio cosmético como la venta de la residencia de los Pinos, o el avión presidencial, Morena conservó y profundizó la estructura capitalista de México con el control de los grandes grupos económicos y la fuerte injerencia del imperialismo de las principales palancas políticas y económicas del país.
Como producto de ello en éstos 6 años la pobreza y miseria en el país se agravó y profundizó, mientras el 1% es cada día mas rico, lo cual agrava la desigualdad del México capitalista. Con AMLO el control e injerencia de las grandes corporaciones imperialistas sobre la economía se profundizó con muchas Megaobras desarrolladas que destruyen el medio ambiente, mientras los pueblos originarios continúan siendo desplazados y rep`rimidos violentamiente de sus tierras, del mismo modo que lo hizo el priato durante décadas. AMLO habló muchas veces de “enfrentar al imperio” pero lo único que hizo fue reunirse con Joe Biden de Estados Unidos y Justin Trudeau de Canadá para ratificar el T-MEC, tratado de Libre Comercio que favorece los intereses de las Corporaciones Capitalistas.
Morena apareció como la “renovación” política de México. Pero pronto las estructuras de la coalición guinda se llenaron de priistas y viejos caudillos con lo peor de los viejos rostros que siempre defendieron los intereses de las clases dominantes, lo que fue transformando prácticamente a Morena en una sucursal del PRI. Quienes creyeron los discursos de AMLO anunciando que Morena iba a ser la “nueva” política se encontraron con los viejos métodos de los caudillos asociados y promotores del narcotráfico, con escandalosas elecciones internas llenas de fraude, quema de urnas, reclamos legales, acarreo de personas, todos los viejos y mas putrefactos métodos de la vieja política de México.
AMLO prometió traer la verdad sobre Ayotzinapa. Pero termino siendo una decepción para quienes creyeron en sus palabras el ver como uno de los casos mas sentidos por nuestro pueblo mediante la política de Morena se volvía a cubrir de un oscuro manto de impunidad, e injusticia, buscando consagrar la impunidad para la cúpula de las Fuerzas Armadas del país. A su vez, miles de mujeres rechazaron las declaraciones machistas y retrógradas del “peje” y debieron salir a las calles a luchar contra los feminicidios y por el aborto legal en rechazo a esta política de Morena. Ésta lucha logró la conquista del aborto legal, pero los feminicidios continúa siendo un pesadilla para millones entre mujeres y familias.
El gobierno de AMLO dice que el país tiene un “peso fuerte”. Pero con su gestión la inflación se devoró nuestros salarios día día, y los precios de los alimentos, los servicios, y el transporte se hacen cada día mas difíciles de alcanzar para las familias. Esta desastrosa gestión ha llevado a franjas del pueblo a restarle apoyo al gobierno, lo que se expresó en las elecciones del 2021 donde Morena perdió y retrocedió en votos, casi la mitad de la población se abstuvo de votar, el voto nulo superó el 1.500.000 votos. La candidatura de Claudia Sheinbaum promete dar “aire fresco”, y “renovación” a Morena, será un gobierno de defensa del capitalismo, y el imperialismo, sin las charlatanerías matutinas del “peje”, pero acompañada por los mismos viejos corruptos caudillos millonarios, y los Cárteles del narco.
Frente Amplio: El PAN y el PRI se disfrazan para ocultar su horrible rostro
También debemos rechazar la candidatura de Xochitl Galvez, la candidata a presidente por la Coalición Frente Amplio por México. La “nueva” denominación de la coalición busca ocultar a los “viejos” partidos capitalistas PAN- PRI, y PRD que no representan los intereses de los trabajadores y el pueblo de nuestro país. Xochitl es presentada como una líderesa indígena, pero fue funcionaria en la oficina de “pueblos indígenas” del gobierno capitalista del presidente Vicente Fox, apoyada por la imperialista ONU, es concurrente a las Cumbre de Davos donde se reúnen la oligarquía capitalista del 1% que domina el mundo.
Con la candidatura de Xochitl y el nuevo nombre de la coalición se oculta el viejo PRI que ocupó de forma ininterrumpida todas las instituciones políticas de México entre los años 1930 y 2000, centralizando el poder en todos los niveles de gobierno con un régimen bonapartista, una “dictadura civil”, un partido- régimen establecido para “congelar” la revolución mexicana. El régimen autoritario establecido se basó en la represión, el fraude electoral, los asesinatos y la corrupción. El “priato” mantuvo el control del estado mexicano como sobre su sociedad, y despojó a los sindicatos y a las asociaciones de campesinos de su independencia y autonomía política.
Tras la masacre de Tlatelolco en 1968, una movilización estudiantil en la cual murieron centenares de jóvenes a manos de las fuerzas de seguridad del Gobierno, la confianza en el PRI cayó, y la violencia policial también presente en otros episodios de represión, como la matanza del Jueves de Corpus en 1971, o la Masacre de Aguas Blancas en 1995, lo transformó en un partido odiado por franjas cada vez mayores de la población. El Partido de Acción Nacional (PAN) ha sido el partido conservador que por durante cuarenta fue competencia política del PRI, y es otro viejo partido dominado por caudillos, y caciques que defienden sus privilegios capitalistas.
La revolución zapatista de 1994 en Chiapas abrió un nuevo momento político, y surgió el PRD, pero la elección le fue robada a su candidato Cuauhtémoc Cárdenas con los mismos viejos métodos gangsteriles del PRI. Los sucesivos gobiernos del PAN, y PRI hundieron en la pobreza a millones de mexicanos, y favorecieron la ganancias de los capitalistas así como también se estrecharon los vínculos con las redes de narcotráfico que desde los 80 comenzaron a penetrar en las estructuras e instituciones del país, cuestión que se agravó cada vez más en los últimos años.
La candidatura de Xochitl busca ocultar a los ojos del pueblo el horrible rostro del pasado de muertes, pobreza, represión, y fraude que ha golpeado nuestro país por décadas. Por mas “progresista” que pretende aparecer, no viene a defender los intereses de los indígenas, ni los intereses del pueblo, sino que viene a conservar la oligarquía de los mismos viejos caudillos capitalistas oculto bajo nuevos nombres y ropajes.
Ni Claudia, ni Xochitl, rechacemos a las candidatas del capitalismo
Desde La Marx México impulsamos esta campaña por la abstención y el voto nulo. Nuestro pueblo ha mostrado ya su rechazo a las coaliciones capitalistas gobernantes, y ya vienen marcando una tendencia: millones no fueron a votar o votaron en blanco, hartos de las mentiras y promesas de los distintos candidatos y de los obscenos gastos en las millonarias campañas electorales. El escepticismo de los pueblos hacia los viejos partidos y dirigentes no es un fenómeno privativo de nuestro país, desde La Marx Internacionalvenimos señalando esta tendencia desde hace varios años: Chile, Irak, Francia, Perú, México, Ecuador, son algunos de los países donde se reveló este mismo fenómeno.
Llamamos a profundizar esa tendencia, la alentamos y la aplaudimos, porque se trata de un enorme salto en la conciencia. Nuestro pueblo comprende que los partidos e instituciones de la democracia capitalista, la democracia de los ricos, no resuelve ninguno de nuestros problemas. El voto en nulo es un voto contra quienes nos gobiernan, contra la desigualdad, contra el capitalismo. Necesitamos rechazar ambas candidaturas, y al “bipartidismo” que establecen para engañar al pueblo.
Es necesario que el nuevo gobierno que surja, sea quien sea la ganadora, nazca con el menor apoyo popular posible, de manera que podamos enfrentarlo en mejores condiciones. Y mientras impulsamos esta campaña nacional por el voto nulo y la abstención, impulsamos y apoyamos todas las luchas, movilizaciones y experiencias de autoorganización. Ésta lucha no hay lugar para grises, o se concurre a votar en apoyo de las dos candidatas y su régimen capitalista corrupto, o le negamos el voto mediante la abstención y el voto nulo, en el camino de la lucha por un gobierno obrero y popular y un México Socialista.
